De este modo, el Ayuntamiento integra a través de la sociedad municipal la gestión de estos servicios vinculados a la movilidad, la disciplina y la seguridad viaria. PUMSA ya gestionaba directamente el depósito de vehículos y los aparcamientos públicos soterrados, y con las nuevas internalizaciones –de acuerdo con los estatutos de la empresa municipal– hace un nuevo paso en su transformación de empresa de promoción urbanística a empresa de servicios. La estrategia también se enmarca en un acuerdo del Pleno de abril de 2016, que a propuesta de ERC-Movimiento de Izquierdas, aprobó por unanimidad analizar la conveniencia de municipalitzar los servicios públicos que el Ayuntamiento prestaba entonces en régimen de concesión. En el mismo sentido, PUMSA gestiona de forma directa desde el 2017 el aparcamiento soterrado de la plaza de las Tereses, una vez se declaró extinguida la anterior concesión.
El pasado 31 de diciembre finalizaron los contratos con la empresa Estacionamientos y Servicios (Eysa) para la concesión de los servicios de zona azul y grúa. El personal vinculado, 24 personas, han sido subrogados por PUMSA desde el 1 de enero. Con esta incorporación, PUMSA pasa a tener 64 trabajadores, el 56% de los cuales dedicados a la gestión de la movilidad.
Del estudio de viabilidad previo a la asunción de los nuevos servicios se desprende que la gestión directa aportará un factor de valor añadido que permitirá dar una respuesta dinámica y más efectiva a las nuevas necesidades y demandas de la ciudadanía. Con los servicios municipalitzats habrá también una gestión económica más eficiente, que aportará unos resultados de explotación al 2019 que se prevén ligeramente mejores.
Los programas de vigilancia y control de la disciplina y seguridad viaria, y en concreto los criterios para la retirada de vehículos de la vía pública, seguirán siendo establecidos por la Policía Local. En este sentido, la denuncia y retirada de vehículos tienen que ser expresamente validadas por un agente de la Policía.