Esta mañana se ha presentado el proyecto “Yes we rent – Lloguem” en el que pone a disposición de los propietarios de pisos vacíos la posibilidad de cederlos para que puedan ser rehabilitados y puestos en el mercado de alquiler asequible. Este proyecto ha recibido una subvención de la Unión Europea de 2,5 millones de euros del presupuesto total de 3,1 millones de euros. Dichos pisos serán gestionados por una cooperativa para el uso.
El alcalde David Bote, acompañado de Elizabeth Ruiz, regidora delegada de Vivienda, Albert Terrones, Jefe de Vivienda del Ayuntamiento y representantes de la Diputación de Barcelona, Fundación Unión de Cooperadores, el Instituto de Gobierno y Políticas Públicas (IGOP) de la Universidad Autònoma de Barcelona y Salesians Sant Jordi – Fundación Jovent han presentado el proyecto, bautizado como ‘Yes we rent/Lloguem’.
El desarrollo del proyecto tendrá una duración de tres años en líneas generales, teniendo su inicio a mediados de 2019. El coste total del proyecto será de 3,1 millones de euros de los cuales 2,5 millones son aportados por la Unión Europea a través del programa europeo Urban Innovative Actions, que forma parte de los fondos FEDER. El resto, los 625.000 euros son aportados por los diferentes socios, principalmente en cuantificación de gastos de personal. El Ayuntamiento desarrollará el proyecto en consorcio con la Fundación Unión de Cooperadores, la Diputación de Barcelona, Salesians Sant Jordi – Fundación Jovent, el Instituto de Gobierno y Políticas Públicas (IGOP) de la Universidad Autònoma de Barcelona y el TecnoCampus Mataró-Maresme.
“Yes we rent – Lloguem” se enmarca en el Plan Local de Vivienda 2018-2023, la iniciativa Mataró 2022 y el compromiso en la promoción del cooperativismo. Su objetivo es explorar otras formas de buscar alquileres asequibles para la ciudadanía. En palabras del Alcalde David Bote “Queremos arriesgar y buscar soluciones diferentes”. Por lo que en concreto se impulsará la creación de fórmulas cooperativas entre demandantes de vivienda de alquiler (cooperativas de inquilinos) que permitan ofrecer condiciones favorables a propietarios de vivienda y generar una oferta de alquiler asequible y estable a largo término.
Por un lado, el proyecto propondrá incentivos a aquellos propietarios que opten por incluir su vivienda en el programa a la realización de obras de rehabilitación de su vivienda, subvenciones a fondo perdido para actuaciones de eficiencia energética de las viviendas, a una garantía absoluta de cobro mediante un fondo de garantía propio, a beneficios fiscales en impuestos municipales como el IBI o la plusvalía y a la gratuidad en la gestión del alquiler.
A cambio de la mejora del patrimonio y de la seguridad en los ingresos, se negociará una retribución que será justa para el propietario y asegurará la asequibilidad de la vivienda.
Este proyecto no contempla la política de vivienda de alquiler social tan necesaria en Mataró.
Rehabilitación de pisos desocupados
Las viviendas serán rehabilitadas per medio de programas de inserción laboral de personas vulnerables garantizando unos estándares de calidad óptimos y pactado con el propietario. Se busca así potenciar la ocupación entre personas con dificultades de inserción.
Preguntado al jefe de vivienda del Ayuntamiento, Albert Terrones, por la posibilidad de aplicar en el proyecto la “masoveria urbana”, su respuesta es que en este proyecto no lo contemplan.
Cooperativa de inquilinos
De manera paralela se impulsará la creación de proyectos de carácter cooperativo por parte de demandantes de alquiler encargados de la gestión de las viviendas. Se prevé que las Cooperativas asuman la relación con los propietarios y cedan el uso de las viviendas a los socios que cumplen los requisitos de acceso que determinen sus estatutos.
El usuario cooperador obtendrá un alquiler más asequible que el del mercado con unas mejores condiciones de estabilidad.
El estado de la Vivienda en Mataró
Por último y no menos importante, según informa el Ayuntamiento hay en la actualidad 3.381 pisos vacíos, un 75% de propiedad de particulares. Por otro lado, se estima que en el último año el precio del alquiler en Mataró ha crecido un 33%.